Hay muchas cosas que quiero decir,
muchos verbos terminados en "te"
¡QuĆ© peculiar los verbos!, acciones ligadas al sujeto,
sujeto presente, omnipresente, tƔcito,
pero ligadas siempre por un hilo invisible,
o visible ¿QuĆ© mĆ”s da?
Hay muchos amores,
pequeƱos, medianos, gigantes,
resistentes al agua o hechos de papel,
compactos, de bolsillo,
como llaveritos sin llaves.
otros chiquitos, chiquiticos,
como besitos de hormiga,
tambiƩn hay grandes, grandotes
como gigantes de rĆo,
que no caben en el pecho,
que se desbordan por el cuerpo,
que se chorrean por los dedos,
que se acurrucan en la garganta.
Hay miradas... miradas mironas,
miradas con los ojos
miradas con el alma.
miradas que se sienten en la distancia
miradas que juegan a ser camiones.
camiones que te arrollan,
que se chocan con otras miradas inocentes.
Miradas pobres, que no trasmiten,
miradas sucias, que desconfĆan,
miradas atrevidas, que te desnudan,
miradas a ojos cerrados, que cautivan,
Miradas que son ventanas,
miradas que son abismos,
miradas que no son ojos si no los miran.
Hay palabras que dan vida, que existen si las nombro,
palabras difĆciles, que no se entienden,
palabras simples y bonitas,
palabras que retumban como truenos,
palabras que lastiman como dagas.
unas dan consuelo al afligido,
otras rompen el silencio a su paso,
muchas son infinitas, eternas,
otras desean no haber nacido,
palabras que son universos expandibles,
¡quĆ© cambian, quĆ© explotan! y al hacerlo... crean.
Hay cosas infinitas, recuerdos que no se olvidan,
cosas que transforman el vacĆo en algo,
como si no advirtiera que antes de mi ya existĆa un vacĆo,
y que mi presencia vino a transformar ese vacĆo en alguien,
en alguien que soy yo, pero que antes era un vacĆo
que tambiĆ©n vendrĆa siendo yo transformada,
aunque ya no puedo volver a ser el vacĆo aquel... asĆ estĆ© llena de vacĆos.
muchos verbos terminados en "te"
¡QuĆ© peculiar los verbos!, acciones ligadas al sujeto,
sujeto presente, omnipresente, tƔcito,
pero ligadas siempre por un hilo invisible,
o visible ¿QuĆ© mĆ”s da?
Hay muchos amores,
pequeƱos, medianos, gigantes,
resistentes al agua o hechos de papel,
compactos, de bolsillo,
como llaveritos sin llaves.
otros chiquitos, chiquiticos,
como besitos de hormiga,
tambiƩn hay grandes, grandotes
como gigantes de rĆo,
que no caben en el pecho,
que se desbordan por el cuerpo,
que se chorrean por los dedos,
que se acurrucan en la garganta.
Hay miradas... miradas mironas,
miradas con los ojos
miradas con el alma.
miradas que se sienten en la distancia
miradas que juegan a ser camiones.
camiones que te arrollan,
que se chocan con otras miradas inocentes.
Miradas pobres, que no trasmiten,
miradas sucias, que desconfĆan,
miradas atrevidas, que te desnudan,
miradas a ojos cerrados, que cautivan,
Miradas que son ventanas,
miradas que son abismos,
miradas que no son ojos si no los miran.
Hay palabras que dan vida, que existen si las nombro,
palabras difĆciles, que no se entienden,
palabras simples y bonitas,
palabras que retumban como truenos,
palabras que lastiman como dagas.
unas dan consuelo al afligido,
otras rompen el silencio a su paso,
muchas son infinitas, eternas,
otras desean no haber nacido,
palabras que son universos expandibles,
¡quĆ© cambian, quĆ© explotan! y al hacerlo... crean.
Hay cosas infinitas, recuerdos que no se olvidan,
cosas que transforman el vacĆo en algo,
como si no advirtiera que antes de mi ya existĆa un vacĆo,
y que mi presencia vino a transformar ese vacĆo en alguien,
en alguien que soy yo, pero que antes era un vacĆo
que tambiĆ©n vendrĆa siendo yo transformada,
aunque ya no puedo volver a ser el vacĆo aquel... asĆ estĆ© llena de vacĆos.